Cuando nos iniciamos en el juego online es muy probable que nos veamos bombardeados por una gran cantidad de ofertas y de publicidad derivada de diferentes páginas webs relacionada con las diferentes promociones de los casinos online. Existen diferentes tipos de bonos de casino y es importante conocer su funcionamiento antes de lanzarnos a utilizarlos, además de conocer bien sus términos y condiciones.
Antes de ahondar sus características, es importante conocer su objetivo: captar nuevos jugadores y fidelizar los ya existentes. Los operadores de los casinos entienden los bonos como una forma de atraer nuevos clientes que puedan aumentar sus fondos con poca inversión y probar los diversos juegos de los casinos online.
Con este fin de beneficiar a sus jugadores, la mayoría de los bonos son completamente gratuitos y se ofrecen de manera sencilla y directa a los jugadores.
Para poder entender el funcionamiento de las diferentes bonificaciones, hay que tener en cuenta el significado de los conceptos que explicamos a continuación.
Rollover
Es muy habitual que los casinos online entreguen a sus jugadores tiradas o giros gratuitos, destinados a jugar en las tragamonedas. Algunos casinos incluso especifican en qué slot o tragamoneda se pueden gastar las tiradas gratuitas, sin poder utilizarlas en otras.
Sin embargo, para obtener esta bonificación debes cumplir con las pautas concretas que establezca cada promoción.
El principal requisito a tener en cuenta es el rollover. Este consiste en la obligación de apostar una determinada cantidad un número concreto de veces antes de poder retirarla. Por tanto, si queremos aprovechar el bono, tendremos que apostar un número x de veces para conseguirlo.
Caducidad o tiempo de validez
Es el plazo del que dispone un jugador para utilizar su bono una vez aceptado. Se encuentra definido en las condiciones del mismo y suele ser muy limitado, no superando en la mayoría de los casos los tres meses. Es muy importante tenerlo en cuenta ya que, en caso de no usarlo a tiempo, el saldo correspondiente al importe del bono se descuenta de la cuenta del jugador.
Bonos con depósito / bonos sin depósito
El depósito hace referencia a la cantidad de saldo que un jugador pone a disposición en su cuenta. Este saldo se asocia a los bonos, que pueden ser de estos dos tipos:
- Bonos con depósito: Requieren el ingreso de una cantidad mínima establecida para poder utilizarlos.
En los bonos con depósito se limita la cantidad máxima, lo que quiere decir que no porque ingresemos una cantidad alta recibiremos un bono mayor. Por el contrario, si nuestro ingreso no llega al límite mínimo, no obtendremos el bono.
- Bonos sin depósito: se obsequian al jugador sin que tenga que realizar ingreso alguno, es decir, sin depósito previo.
Los bonos sin depósito más conocidos son los bonos de bienvenida, que ofrecen una cantidad de dinero o de tiradas gratis a los jugadores simplemente por registrarse en la web, como estrategia de captación de nuevos usuarios.
Requisito de apuesta o liberación
Este concepto es clave para poder aprovechar los bonos de los casinos online. Lo que quiere decir es que los bonos deben ser “liberados” es decir, no se pueden retirar automáticamente cuando un casino online te los concede, sino que primero debes jugar con ellos. Las veces que tengas que jugar o el importe que tengas que apostar en total antes de poder retirarlos es el requisito de apuesta. Muchos jugadores pierden sus bonos antes de haber alcanzado este requisito.
Existen dos tipos de requisitos de apuestas, el que tiene en cuenta la cantidad del bono, y el que tiene en cuenta tanto la cantidad del bono como la cantidad del depósito.
Los más beneficiosos son aquellos bonos cuyo requisito de liberación solo tiene en cuenta la cantidad del bono, ya que no tendremos que realizar un depósito mínimo para poder apostar con él y posteriormente liberarlo.
Por tanto, aunque, como decíamos al inicio, los bonos están pensados para atraer a los jugadores, el operador online debe obtener también sus propios beneficios, por lo que es indispensable tener algunos conocimientos previos como los que hemos mencionado, antes de canjear un bono, para saber si nos sale rentable su uso.